Un volcán joven y único. Se trata de una colina negra, sin vegetación y con laderas empinadas. Es una excelente opción turística por su entorno natural sorprendente, la posibilidad de subir y descender del cono volcánico, apreciar tu cráter, y realizar una actividad de canopy. El volcán tiene una altura de 500 metros y subir es un trayecto de una hora aproximadamente, aunque su pronunciada pendiente hace el trayecto un poco difícil. En cambio descender es mucho más sencillo. La panorámica desde la cima es magnífica, se aprecia la cadena volcánica que atraviesa varios departamentos de Nicaragua.

💡Curiosidades En 2015 se instaló una infraestructura de canopy llamada Canopy Cerro Negro. Ésta ofrece un recorrido de 829 metros a través de 7 plataformas, una caseta de instrucción y espera, y un puente colgante de 17 metros. A la entrada se debe pagar una tarifa, ya que se trata de un área protegida.